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El 47% de los estudiantes de postgrado tienen más de cuarenta años. Y, aunque pueda sorprender, el número de alumnos FaB («Fifty and Beyond») esa generación nacida entre 1945 y 1970, supera a los millenials (un 13% frente a un 12%). Unas cifras que arroja un estudio realizado por el IMF Business School que señala que ocho de cada diez compagina estudios y trabajo, siendo el 75% profesionales de la empresa privada, el 3% trabajadores públicos y un 2% autónomos. Las motivaciones que los mayores encuentran para seguir formándose se centran en la actualización de conocimientos (upskilling) y el reciclaje de estos (reskilling) con el fin de volver a ser profesionales atractivos en el mercado de trabajo, ya sea para reenfocarse en nuevas profesiones (reinvención profesional), evolucionar en su «expertise» (nuevas habilidades profesionales), emprender un nuevo proyecto o trabajar por cuenta propia como autónomo, consultor o «interim manager».
«La formación y el aprendizaje deben ser una constante en la carrera profesional, se tenga la edad que se tenga, y se tenga la experiencia que se tenga», señala Gloria Juste, directora de proyectos de Fundación Endesa y responsable de Generación Savia, un punto de encuentro con el colectivo senior, que lanza iniciativas, facilita soluciones, genera sinergias y crea oportunidades para mayores de 50. Un proyecto único en colaboración con Fundación máshumano, que «cuenta con la oferta académica de varias universidades, escuelas de negocios o programas, cuyos estudios se desarrollan a través de másteres, cursos, posgrados o programas de estudio específicos. Estos centros ofrecen condiciones especiales para los profesionales mayores de 50 años que están registrados en nuestra web, como descuentos, bonificaciones o becas», explica Juste.
En concreto, con la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR), se ha diseñado un programa de formación «ad hoc» que trata de dar respuesta a lo que demandan tanto las empresas como el talento senior para su vuelta al mercado de trabajo. «Es un programa exclusivo, porque no hay nada similar en el mercado de la formación específico para mayores de cincuenta», puntualiza Juste quien deja claro que «el senior es digital, se puede adaptar muy bien al mercado de trabajo actual y será esencial en la reconstrucción del país en ese contexto al que se está calificando como la nueva normalidad y que nosotros preferimos llamar la nueva oportunidad para el talento senior».
Respuestas a la nueva realidad
En ello coincide Andrés Raya, director ejecutivo de Portfollio de Programas de Executive Education de Esade, quien precisa que la formación para seniors ofrece «los conocimientos necesarios para enfrentar la nueva realidad así como las actitudes y competencias que se requieren para gestionar el new normal. Que tiene mucho de new y muy poco de normal», y precisa que «los programas más demandados son los que dan respuesta a los requerimientos actuales. Programas de digitalización, de liderazgo, de inteligencia artificial, de Business Agility o de Legaltech».
La formación para seniors está pensada para para profesionales que han de compaginar vida personal y profesional. Cada vez se opta más por modalidades virtuales que presenciales. «Un Máster en línea permite no solo una mayor flexibilidad horaria y facilidad de conciliación, sino que, además, y por su propia naturaleza, facilita la actualización constante del material, la personalización de los contenidos, la internacionalización y, también, permite ofrecer un precio algo más bajo que el de los cursos presenciales. Ahora hay que sumar las exigencias de un mundo poscoronavirus. Las medidas de distanciamiento social tardarán en desaparecer y muchos de los hábitos que estamos adquiriendo en esta fase se quedarán. Entre ellos, la digitalización de muchos procesos», explica Raya.
Además de formación sobre competencias digitales, se muestran interesados en formaciones que les certifiquen y les habiliten para el mercado de trabajo, como en el entorno «Agile» (metodologías ágiles, “scrum”, Kanban... y nuevas profesiones (Salesforce, SAP...), señalan desde Generación Savia.
Formación de base
Una de las entidades educativas que colabora con Savia es la Escuela de Negocios y Dirección (ENyD). Su director, Francisco Santos, precisa que «el ámbito digital es una buena salida, pero debemos tener en cuenta la formación de base. No es fácil reconvertir a un profesional de letras en un analista de datos donde se requiere un alto nivel matemático. Un programa orientado a entender la nueva economía digital sí puede ser interesante y, por supuesto, programas destinados a mejorar la toma de decisiones para optar a puestos de mayor responsabilidad». En este aspecto, estos expertos coinciden en que el perfil mayoritario son profesionales con experiencia de al menos 5 años y, la media, está entre los 10 y los 20 años de experiencia, que quieren actualizar sus conocimientos o dar respuesta a los retos actuales.
Santos insiste en la importancia de «romper el cliché de que la formación de este tipo es solo válida para jóvenes. Un senior busca perfeccionar conocimiento y abrirse nuevas oportunidades. Un trabajador con inquietudes estará continuamente formándose, esto le hará dar mejor servicio y también poder competir mejor en el mercado laboral, algo especialmente interesante en el caso de un senior», y deja claro que «el talento no tiene edad. Muchas empresas están cambiando sus perspectivas respecto a la captación del talento y si bien antes el foco estaba puesto en los jóvenes, esta visión tan limitada ya no es válida porque además, existen dificultades para fidelizar a empleados millenial, por lo que se ha puesto el talento senior en el punto de mira.
En un mercado laboral donde dos de cada cinco parados son seniors -cifra que desde 2008 se ha incrementado en un 126%- este cambio de perspectiva del que habla Santos, unido a las nuevas competencias que les aporta una formación específica, supone un importante salvavidas para recuperar el talento senior.
