Incluso sin contar webs y plataformas, en España cada vez hay más aficionados a ver series y programas en diferido (hasta siete días después del estreno). Si en 2017 cerca de 13 millones de espectadores consumieron al menos un minuto de televisión a la carta al mes, en 2019 esta cifra supera ampliamente los 16 millones. Es decir, en solo tres años, esta forma de acercarnos a la pequeña pantalla ha crecido un 20%, según publica un informe de la consultora Geca. A diario, una media de 3,5 millones de personas sintonizan contenidos a demanda. Aunque esta cifra aún está lejos de los más de 30 millones que ven espacios en directo, sí indica que los televidentes cada vez quieren ser más independientes de los dictámenes de la parrilla.
Tal y como explican los analistas de Geca, esta tendencia se explica por tres motivos. El primero es el cambio en los hábitos de los espectadores, que afectará especialmente a contenidos de ficción. El «progresivo retraso en la hora de inicio de los contenidos estrella del prime time en las principales cadenas» es otra de las razones. También ayuda el crecimiento exponencial de la televisión de pago, presente en casi el 50% de los hogares. Las mejoras tecnológicas (televisores inteligentes, decodificadores con disco duro, dispositivos para reproducir contenidos bajo demanda y función de los últimos siete días) hacen que el 87% de los hogares tengan capacidad para ver contenidos a la carta, apuntan los analistas.
En cuanto al perfil del público, destacan los jóvenes menores de 45 años (48% del consumo total a la carta) residentes en grandes comunidades (Madrid, Andalucía y Cataluña). Además, más de la mitad del consumo bajo demanda se hace el mismo día del estreno o el día después. El momento favorito de los televidentes para ver contenidos a la carta es el fin de semana, sobre todo el domingo. Curiosamente, la mayoría de estos contenidos se ven en compañía.
Las series, muy beneficiadas
La ficción es la reina del consumo a la carta, al que dedicamos de media 7 minutos por persona y día de los 214 que pasamos frente al televisor: las veinte emisiones más vistas a la carta desde que se mide este tipo de audiencia (2015) son series. En esta temporada, destacan «Malaka» y «Estoy vivo», que crecen un 20% gracias a los aficionados a ser su propio programador. Mención especial merece «Juego de Tronos», cuyos datos se basan casi totalmente en el consumo a la carta. En Estados Unidos, según publica «Variety», estrenos como «Prodigal Son» y veteranas como «Anatomía de Grey» y «911» ganan hasta un 80% de espectadores tras su estreno.
Los televidentes de las cadenas tradicionales son menos aficionados a elegir cuándo ver sus contenidos favoritos que los de la TDT o los del pago. Mientras en las generalistas el crecimiento medio de series y programas no supera el 20%, en las temáticas llega a representar hasta el 50% y en los de pago es claramente mayoritario.
