«Desde que desapareció Cristina, hasta hoy, no hemos tenido ninguna noticia de su paradero»
Este sábado se cumplen 9.861 días sin que Luisa Vera y Juan Bergua sepan nada de su hija Cristina . La adolescente desapareció el 9 de marzo de 1997 en Cornellá (Barcelona). Debía volver a casa a las diez de la noche, pero no lo hizo. Son 27 años de una ausencia que consume a sus progenitores. «Desde que desapareció, hasta hoy, no hemos tenidos ninguna noticia de su paradero », explica él a ABC. Ninguna noticia, porque aquel anónimo que recibieron y que apuntó que había que buscar sus restos en el vertedero del Garraf, no llevó a nada. La Policía Nacional buscó, durante 30 días, pero sin éxito. En el punto de mira de los investigadores estaba quien había sido pareja de la joven de 16 años, y que mostró total frialdad ante su desaparición. Aquella tarde, según relataron las amigas de Cristina, había quedado con él, Javier R., para dejar la relación. El individuo, diez años mayor que ella, aseguró que la había dejado cerca de su casa, en la carretera de Esplugues. Noticia Relacionada estandar Si Andreu y Xot, un binomio de seis patas para buscar desaparecidos Elena Burés La clave, más allá del olfato, es que el guía logre interpretar las señales del animal. Así, este bombero y su perro han localizado a decenas de personas, no siempre con vida Las pesquisas no se tradujeron en indicios para llegar a imputarlo. Interrogado en varias ocasiones –primero por el CNP y luego por los Mossos–, siempre mantuvo la misma versión y una actitud fría y distante. Los agentes llegaron a registrar tres kilómetros de alcantarillado que comenzaban en una arqueta del patio de la casa del sospechoso, pero no encontraron nada. Luisa y Juan saben que sin nuevas pistas o indicios, los investigadores no tienen hilo del que tirar. Su esperanza es un nuevo anónimo, «que alguien tenga remordimiento de conciencia y nos diga dónde está, o que aporte algo nuevo para que podamos descansar, porque esta incertidumbre de tantísimos años...No lo podemos superar», explica él. «No dejas de preguntarte qué es lo que pudo suceder. Pero no encontramos respuestas» Juan relata que, con el paso del tiempo, -tiene 76 años- es todavía más difícil. Gracias a él, y algunos otros familiares de desaparecidos, nació Inter-SOS , primera asociación en España para impulsar sus búsquedas, cuando por entonces -1998- ni siquiera las denuncias se compartían entre comisarías. Su empeño se tradujo, no solo en cambios en la investigación -no quisieron cogerle la denuncia la noche de la desaparición y le instaron a esperar; cuando ahora debe hacerse cuanto antes- , sino también en la creación del Centro Nacional de Desaparecidos . Pese a tantos avances, la familia Bergua lamenta que, al igual que ellos, muchos otros siguen sin conocer el paradero de sus hijos, que desaparecieron siendo menores. «No dejas de preguntarte qué es lo que pudo suceder. Pero no encontramos respuestas». Su ruego es el de tantos otros en su misma situación, la del duelo congelado: encontrar a sus seres queridos y «tener al menos un cuerpo que llorar».