Muchos grandes clubs de Europa se preparan para un verano movido en cuanto a la remodelación de sus plantillas. Bayern de Munich, Manchester United y Chelsea son tres de ellos, en pos de una reconstrucción que les permita recuperar foco en el terreno deportivo.
Uno de estos equipos, el Chelsea, volverá a agitar su vestuario, algo que ya se ha convertido en un hábito desde que Todd Boehly asumió la propiedad de la entidad de Staamford Bridge. Volver a salir de compras obligará a agilizar salidas de algunos futbolistas por los que pagó no hace tanto sumas considerables de dinero.
Uno de estos futbolistas estuvo en un pasado relativamente reciente entre los jugadores que se vincularon al FC Barcelona.
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