En el extremo norte de la ciudad, a los mismos pies del viejo monasterio de San Jerónimo de Buenavista, los años han ido cubriendo de olvido nombres, historias, recuerdos y memoria de un pequeño y decadente cementerio. Lápidas mohosas o destrozadas y apellidos británicos cincelados dan fe del importante legado humano que allí reposa, lejos del rabioso presente y de todas las miradas. Quizás por eso el abandono ha causado ya tantas heridas en este sobrecogedor lugar. El cementerio de San Jorge, denominado así por el patrón de Inglaterra y también conocido como cementerio de los Ingleses de Sevilla, pasa por ser uno de los secretos mejor guardados de la ciudad pese a estar cargado de valor histórico. Ese arcano...
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