Lo importante no es el Sahara sino el precio. Lo grave no es la bofetada al derecho internacional o la traición al pueblo saharaui sino si hemos obtenido a cambio algo realmente interesante. Los estados tienen intereses y el primer interés de España es Marruecos. Si Pedro Sánchez ha conseguido de los marroquíes un compromiso serio de no reclamar Ceuta y Melilla durante las próximas tres generaciones, y que controlen sus fronteras en lugar de mandarnos a balseros por miles, habrá sido un movimiento valioso, aunque conociéndolo, lo más probable es que haya vendido barato un apoyo tan caro como el que acaba de prestar a nuestros vecinos del piso de abajo, y que simplemente haya pactado que no le...
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