Once narcolanchas se refugian del temporal en las costas de Manilva
Nuevo temporal y las lanchas de los narcos vuelven a verse desde la costa andaluza. Esta vez el punto de reunión ha sido el litoral de Manilva en Málaga. Fuentes municipales explican que durante la mañana ha habido «más de once narcolanchas» frente a las playas de este municipio. Allí refugiadas, esperando a que se calme el mar para volver a los puntos de 'aguardo'. El más importante de éstos está al sur de la Isla de Alborán, frente a Marbella y Estepona. Tras la prohibición de éstas lanchas los traficantes dejaron de tenerlas en tierra. Pasaron a tener la embarcación, con un valor de más de 300.000 euros, el riesgo de incautación hizo que permanezcan en los 'meeting point', donde reciben avituallamiento y cambios de tripulación , hasta que son requeridos para ir a Marruecos, cargar con hachís o cocaína y meterlo en las costas andaluzas en menos de minutos. Sin embargo, la ligereza de estas lanchas hace que puedan volcar con los golpes de mar cuando hay temporal. Es por eso que, cuando los oleajes son peligrosos, las lanchas se refugian en zonas costeras donde no hay este peligro. El primer gran punto de concentración de estas embarcaciones fue la desembocadura del Guadalquivir , hasta que un accidente acabó con la vida de un piloto. La presión allí hizo que, en otro temporal, las embarcaciones se refugiaran en varios puertos, como el de Barbate. Dos guardias muertos Allí, en una operación para identificar a varios tripulantes dos agentes fueron asesinados . Esa mañana había seis lanchas en la bocana del puerto. Una de ellas pasó encima a una zodiac de la Guardia Civil con seis agentes. Dos murieron y otros dos resultaron heridos. El foco se puso en esta zona del litoral. Por eso, al siguiente temporal, las lanchas aparecieron en la otra punta de Andalucía. Una decena de ellas se refugió en Cabo de Gata en Almería . Primero en la Playa de los Genoveses y después se fueron a Las Negras. Cuando pasó el temporal desaparecieron, pese al seguimientos al que estaban sometidas. Y todo quedó tranquilo hasta el miércoles. Un nuevo temporal fuerte en el Mar de Alborán las ha hecho aparecer. Han aprovechado los 1.000 kilómetros de costa para seguir jugando al ratón y al gato. En esta ocasión, el punto de concentración ha sido Manilva. Frente a las playas de la ciudad, alrededor de una docena de lanchas han fondeado para no volcar en alta mar.