El Partido Popular presume de ser la única formación que tiene «los dos pies dentro de la Constitución». Hoy, cuando se cumplen 41 años del referéndum que aprobó la Carta Magna, Pablo Casado ha subrayado que la Constitución es la solución a los problemas, y no el problema. En ese sentido, ha prometido que el PP actuará como minoría de bloqueo para evitar que el PSOE y sus socios populistas e independentistas puedan imponer una reforma.
Al llegar a la carpa instalada en el patio del Congreso de los Diputados, el líder del PP ha advertido de que los populares echarán mano al recurso previo de inconstitucionalidad, en su caso, si los socialistas y sus aliados pretenden imponer una reforma por la puerta de atrás, es decir, mediante la aprobación de estatutos de autonomía.
En la semana de la Constitución, Casado ha defendido de manera especial el contenido del artículo 2, el de la indisoluble unidad de la Nación española, frente al PSOE y al PSC, que se abonan a la idea de la «plurinacionalidad». El PP, ha advertido su líder, no permitirá que el PSOE vacíe de contenido ese artículo básico.
Hoy en el Congreso, acompañado por Teodoro García Egea, Javier Maroto y Pablo Montesinos, Casado ha subrayado que España vive un «momento crítico», ya que en estas décadas nunca se habían negociado unos Presupuestos en la cárcel, ni se había incluido en el Gobierno a quien pide la abolición de la Monarquía Parlamentaria.
«Ahora más que nunca hay que defender el modelo de convivencia de la Constitución, y el Partido Socialista tiene una responsabilidad en ello», ha advertido.
Respecto a un posible acercamiento del PSOE y el PP, Casado ha recordado que Sánchez ha elegido como socios a los enemigos de la Constitución, y eso es absolutamente incompatible con los populares.
«El Partido Popular, más que nunca, defiende la Constitución, la unidad nacional y el Rey de España», ha remarcado.
