Estudio revela que la población confía en las empresas pero no en el capitalismo
Las empresas son la institución más confiable según 58 por ciento de los más de 34 mil encuestados en 28 mercados en el mundo, según el Barómetro de Confianza 2020 de la firma Edelman presentado en Davos, Suiza, el día de hoy y al que Milenio tuvo acceso en exclusiva.
Los encuestados están en 28 mercados, y de estos: 12 confían en las empresas, 9 se mostraron neutrales y 7 mostraron desconfianza. Las empresas toman un rol sobresaliente en la gobernanza global.
Si bien las empresas son la institución que genera mayor confianza, 56 por ciento de los encuestados dice que el capitalismo (como se conoce el día de hoy) genera más daño que beneficios al mundo.
Esta percepción se mantiene entre diferentes segmentos de la población que fue encuestada, es decir, no importa el género, el nivel de ingreso o la edad de los encuestados, la mayoría ha roto el encanto con el capitalismo. Sin embargo, hay algunas variaciones.
La población más crítica del capitalismo es la de entre 35 y 54 años (59 por ciento), seguido de la de entre 18 y 34 (57 por ciento), terminando con las personas de más de 55 años (53 por ciento). En materia de género la variación es de un solo punto porcentual: 56 por ciento de las mujeres creen que el capitalismo es dañino en comparación con 57 por ciento de los hombres.
En cuanto a los diferentes niveles de ingresos, el cuartil superior, de mayores ingresos, supera al cuartil inferior de menores ingresos por dos puntos porcentuales, es decir, 57 por ciento y 55 por ciento, respectivamente. El cuartil medio es el que muestra más descontento con el capitalismo con 59 por ciento.
El estudio Edelman Trust Barometer 2020 es una medición de la confianza en cuatro instituciones: el gobierno, los medios de comunicación, las empresas y las asociaciones civiles. La confianza se otorga bajo dos atributos: el primero es la competencia, como la capacidad de cumplir las promesas, y el segundo es el comportamiento ético, el hacer lo correcto y trabajar para mejorar a la sociedad. No se trata solo de lo que se hace sino de cómo se hace.
La segunda institución con mayor confianza, casi pareja con las empresas, son las asociaciones civiles, y luego los medios de comunicación y gobierno también peleándose el tercer y cuarto lugar, respectivamente. Gobierno, por cierto, solo en México, tuvo un incremento de 10 puntos porcentuales en un año y ahora se confía más, aunque no logra pasar la barrera del 50 por ciento de confianza. El estudio basado en los resultados de México se publicará en un par de semanas.
Dentro del tipo de empresas con mayor confianza están aquellas que son propiedad de una familia, después siguen las privadas, luego las públicas, es decir, aquellas que cotizan en Bolsa, y finalmente, las empresas del estado. Ninguno de estos perfiles de empresas cae en una percepción de desconfianza, todas están por encima de la barrera de los 50 puntos.
Otras percepciones, otras realidades
La percepción sobre el capitalismo es la única que se mantiene a través del total de los encuestados. En general, la población más privilegiada siente más confianza en las cuatro instituciones evaluadas que la que fue encuestada y no necesariamente tiene acceso a educación, consume noticias especializadas o participa en la generación de políticas públicas, según la definición del mismo estudio.
La percepción de confianza entre estos dos grupos puede variar hasta 15 puntos porcentuales. Por ello, el estudio precisa que la inequidad afecta los grados de confianza que sienten los encuestados en las distintas instituciones.
Esto suma también a la conclusión de que el liderazgo ha cambiado. Los directores generales tienen, según 92 por ciento de los encuestados, la responsabilidad de ser líderes vocales en los temas con mayor importancia. Y, ¿cuáles son los temas importantes para los encuestados?
Se pide a los directores generales que se priorice al tema de qué habilidades y capacidades se necesitan para obtener los puestos de trabajo del futuro. El tema laboral es considerado más importante que abordar la problemática de la diversidad, el cambio climático o de la migración, aunque también los destacan.
Las empresas y sus líderes tienen hoy más pendientes en sus listas para cumplir con su nuevo rol en la gobernanza global. Hacer lo correcto tiene un impacto en la percepción y generación de confianza. Si el gobierno, las empresas, las asociaciones civiles y los medios quieren mejorar su puntaje para 2021, el comportamiento ético tendrá que estar al centro.