Las bicicletas y los «blockbusters» son para el verano, aunque para el de 2020 habrá más paseos en bici que actores de Hollywood en la gran pantalla. Los grandes estudios han renunciado a la temporada estival, reservada tradicionalmente para los títulos más palomiteros, ante el miedo y la incertidumbre que provoca el coronavirus. Sony era la última «major» que mantenía las fechas, pero a comienzos de esta semana confirmó que posponía sus estrenos de verano hasta el año que viene.
Prescindir de la «summer season», que va de mayo a agosto, supone olvidarse del 40 por ciento de la recaudación anual, ya que en esos cuatro meses se facturan, solo en el mercado americano, 4.000 millones de dólares en entradas vendidas. En las fechas que ahora se dan por perdidas se estrenaron las tres películas más vistas de 2019: «Vengadores: endgame» (26 de abril); «El rey león» (19 de julio) y «Toy Story 4» (21 de junio).
Daniel Craig (I)
La estrategia conservadora de Hollywood no se debe solo a las dudas sobre cuándo se levantará el confinamiento. También a la reacción de la gente una vez se pueda salir a la calle sin restricciones. Porque ya hay un antecedente. En China, tras más de diez semanas con los cines cerrados, unas 500 salas reabrieron el 25 de marzo. Los datos fueron pésimos: una media de menos de una persona por sesión. Y eso que el Gobierno anunció que iba a vigilar que se cumplieran las medidas de desinfección. Pero el miedo de los espectadores fue más poderoso que una promesa del Gobierno.
Cancelaciones
El primer gran estudio que decidió posponer un éxito asegurado fue Universal. «Sin tiempo para morir», la película número 25 de James Bond y la última que protagonizará Daniel Craig con el traje de 007, se iba a estrenar este jueves 2 de abril, pero se retrasó hasta noviembre. Solo este cambio le hizo perder los 50 millones de dólares que ya habían invertido en publicidad. La misma productora envió a 2021 la novena entrega de «Fast & Furious», que iba a estrenarse en mayo. Disney también ha dejado «Mulán» en el aire, y Sony pasa al próximo año sus dos apuestas veraniegas, «Cazafantasmas: Más allá» y «Morbius», el «spin-off» de «Spider-man». Más animados están en Warner, que se guardan su mejor disparo, «Wonder Woman 1984», para el 14 de agosto en lugar del 5 de junio previsto. Aunque en la revista especializada «Variety» los tacha de «optimistas» y prevé cambios.
El pelotón de estrenos que se espera a final de año ha obligado también a que determinadas películas tengan que encontrar nuevos caminos. Por ejemplo, «Trolls 2: Gira mundial» se lanzó directamente al alquiler en plataformas, aunque no parece que sea el modelo a seguir, ya que el «streaming» no permite recuperar ni si quiera las decenas de millones de inversión en publicidad de los «blockbuster».
En España la tónica es similar. Aunque en mayo y junio no se llenan los cines, julio y agosto sí son meses de gran recaudación. De hecho, agosto es, tras diciembre, el mes donde más se ingresa.
