Un tribunal de Países Bajos condena a dos rusos y un ucraniano por derribar en 2014 con un misil un avión que sobrevolaba Ucrania
Más de ocho años después del derribo del vuelo MH17 sobre el este de Ucrania, un tribunal holandés ha declarado culpables a tres acusados, que deberán pagar al menos 16 millones de euros a los familiares de las víctimas. Un cuarto acusado, ruso Oleg Pulatov, ha sido absuelto por el mismo tribunal, que se ha reunido bajo medidas de alta seguridad en las inmediaciones del aeropuerto Schiphol de Ámsterdam, desde donde despegó el avión de Malaysia Airlines con destino a Kuala Lumpur. El MH17 fue derribado en el este de Ucrania el 17 de julio de 2014 por un misil de fabricación rusa disparado desde Ucrania cuando Rusia tenía el control de las fuerzas separatistas en ese territorio. 298 personas murieron, incluidos muchos holandeses, y el tribunal ha declarado culpables de esas muertes a los ciudadanos rusos Igor Girkin y Sergei Dubinski y al ucraniano Leonid Kharchenko, que permanecen en Rusia, cuyo Gobierno se niega a extraditarlos. El juez que ha presidido la sala, Hendrik Steenhuis, ha lamentado que ninguno de los cuatro hombres haya comparecido ante el tribunal, en el caso que está en curso desde marzo de 2020. Solo Pulatov tenía abogados que lo representaran en la corte. El derribo del avión de Malaysia Airlines causó consternación en todo el mundo . Los acusados ocupaban altos cargos entre los separatistas prorrusos en el este de Ucrania: Girkin fue oficial de Inteligencia ruso y comandante de los separatistas en Donbass, conocido como 'Strelkov'; Dubinski, era un oficial ruso y adjunto de Girkin. Pulatov, además de asistente de Dubinski. Kharchenko, el ucraniano, dirigía una unidad de combate en la región. Noticia Relacionada estandar Si Se multiplican en Polonia los civiles adscritos al entrenamiento militar desde la explosión del misil Rosalía Sánchez «Nuestra intención es que el máximo número posible de ciudadanos esté entrenado militarmente y pueda usar armas», sostiene Defensa Víctimas de la guerra Una cuestión central en el proceso ha sido que la llamada República Popular de Donetsk estaba bajo el control de la Federación Rusa en ese momento. Los cuatro acusados jugaron un papel clave en la tarea de transportar y disparar el misil tierra-aire del sistema de defensa aérea Buk, con el que el avión fue derribado, según los hallazgos de un equipo internacional de investigación. «Nuestros familiares fueron las primeras víctimas internacionales de la guerra de Ucrania», decía ayer Piet Ploeg, que perdió a varios familiares en el accidente. El misil explotó en el lado izquierdo de la cabina a las 15:20, a unos 10 kilómetros por encima de la zona en disputa en el este de Ucrania. Cientos de diminutas partículas perforaron el avión. El tribunal de La Haya está seguro de que el sistema Buk y el misil fueron trasladados a Ucrania desde Rusia y que el disparo fue efectuado desde un campo cercano a la ciudad de Pyervomaisk. El lanzamiento del misil, según el tribunal, no pudo ocurrir por casualidad y tampoco pudo ser disparado por personas sin los necesarios conocimientos técnicos. Una cuestión central en el proceso ha sido que la llamada República Popular de Donetsk estaba bajo el control de la Federación Rusa en ese momento Las víctimas procedían de diez países y cientos de familiares quisieron estar presentes en el veredicto, unos 80 de ellos viajaron desde Australia. Durante la lectura de la sentencia, han podido escuchar que, en ese momento, la guerra ya estaba en marcha en Donbass , en el este de Ucrania, y que los investigadores internacionales han podido determinar que el misil Buk provenía de Rusia y pertenecía al Ejército ruso . Según estos investigadores, el avión fue derribado desde un campo controlado por los rebeldes. Luego, el arma fue enviada a través de la frontera de regreso a Rusia. Pruebas digitales Moscú rechaza con firmeza todas las acusaciones y culpa sobre todo a Ucrania. El Kremlin nunca reconoció como válidos los resultados de las investigaciones y tampoco la autoridad del tribunal para juzgar el caso. Finalmente, los jueces penales han aceptado el razonamiento de la Fiscalía : está claro que los cuatro hombres acusados no presionaron personalmente el botón de lanzamiento. Con una cadena de pruebas, sin embargo, los fiscales han logrado probar que se encargaron de la obtención del arma y de la operación de derribo del avión. La Fiscalía presentó abundantes evidencias en forma de fotos, vídeos, datos, grabaciones de radio e imágenes satelitales. Pero también, gran parte de las pruebas, provenían de fuentes abiertas o de las redes sociales. «Esta evidencia digital es un nuevo territorio legal», se ha felicitado la abogada Marieke de Hoon. «Su reconocimiento como válidas puede ser importante para otros juicios por crímenes de guerra».