Las lágrimas de Yan Couto tras el Real Madrid - Girona: sale en la foto de todos los goles y hace el penalti al final

El lateral brasileño no encontraba consuelo al final del encuentro

Se acabó el partido entre el Real Madrid y el Girona y uno de los jugadores más tocado era Yan Couto. La imagen de sus lágrimas fue una de las más impactantes después del pitido final. Compañeros y rivales fueron a consolarlo. Le dieron un abrazo su compatriota y compañero Savinho, que tampoco apareció mucho en el Santiago Bernabéu, y su compatriota y rival Vinicius, uno de los responsables de darle una mala tarde.

Yan Couto no tuvo su día en un escenario como el estadio del Real Madrid, club precisamente con el que se le había relacionado como posible fichaje. "Todas estas cosas le tienen que servir; ni hace una semana era jugador del Real Madrid ni ahora es el peor del Girona. Es un gran jugador, tiene 21 años y ha sido ya internacional con Brasil. Lo superará y le viene bien, más allá del mal rato que pase hoy. Tiene 21 años y le han pasado muchas cosas y más le van a pasar. Esto le servirá", reflexionaba Míchel, técnico del Girona, después del encuentro.

El lateral del conjunto catalán empezó su calvario con una pérdida que dio origen al primer gol del Real Madrid, aunque es verdad que Vinicius se inventa un disparo desde lejos espectacular.

En el 2-0, Yan Couto está delante de Vinicius y le falta contundencia para taparle o frenarle. El futbolista del Real Madrid se saca un pase con el exterior que Bellingham aprovecha colándose a la espalda de los centrales. En descarga de Couto, el pase es de pura fantasía.

Después, tampoco sabe cómo detener al extremo del Real Madrid. Vinicius le encara y con una gran maniobra, una "croqueta", se marcha de él, se mete en el área y dispara, para que Bellingham aproveche el rechace y logre el tercero. También le faltó contundencia ahí en el cara a cara con su compañero.

La tortura para Yan Couto no había terminado porque, el cuarto tanto llega después de otra pérdida suya. Se la quita Vinicius en el centro del campo, y Rodrygo arranca en solitario para fusilar a Gazzaniga.

Todavía habría otra última acción, ya que Yan Couto le hizo penalti a Arda Guler, después de que le regateara dentro del área. No tuvo consecuencias más graves porque Joselu mandó la pena máxima al palo. Justo después, llegó el final del partido. Un día para olvidar del lateral pero, como dice Míchel, espectacular por cómo está dirigiendo a su equipo y con sus palabras, un día que también le debe servir para aprender porque con la edad que tiene su límite ahora mismo es casi el infinito.