La invención del éxito
El tópico de la inocencia infantil siempre te ha parecido una extraña invención adulta, un efecto colateral de la nostalgia. Del colegio recuerdas más bien las bravuconadas de los líderes y su exuberante picaresca para aprobar exámenes: chuletas tatuadas en la piel bajo las mangas o el reloj, fórmulas grabadas en el bolígrafo Bic a punta de compás, apuntes en la papelera, perfeccionadas maniobras de distracción a la autoridad.