Los otros 'derbis' en el banquillo de Pellegrini y Quique

Hijo de futbolista y socio del Sevilla en su juventud, Quique Flores se acercó con un reverencial respeto al derbi cuando se le preguntó por el mismo tras el partido con el Mallorca. Prácticamente eludió la respuesta con un lacónico « sé lo que puede significar, pero quiero que me lo expliquen muy bien ». Se expresó el técnico del Sevilla como si se sintiera aún en tierra extraña, cual turista que llega a un lugar desconocido y necesita respuestas a muchas preguntas. Habló así quien acumula nada menos que 423 partidos en los banquillos del fútbol de élite desde que arrancara su experiencia en Primera en 2004 en Getafe. Con tan longeva trayectoria, mayor aún en el caso de Manuel Pellegrini ( 780 encuentros dirigidos ), huelga señalar que el preparador madrileño ha vivido ya numerosos encuentros de la máxima rivalidad, sobre todo en Madrid y Valencia, fundamentalmente. Partidos de mucha pasión y alto voltaje emocional también. Pero ninguno con la singularidad, el significado, la previa y el largo pospartido de un Betis-Sevilla , del que se saborean las vísperas y, ya se sabe, se sufre o disfruta la resaca. Sabe Quique que el tópico responde en este caso a la realidad: es un partido único, especial, sin parangón, con denominación de origen. Y el que viva en el Benito Villamarín este domingo será el primero de su vida. Más dilatada es ya la experiencia de su homólogo en derbis sevillanos, así como nutrido el bagaje de ambos en derbis de otras latitudes. De España e Inglaterra pasando por Portugal y Argentina. Llevan tantos años de manera continuada en los banquillos de Primera, clásicos como son del fútbol español, que han coincidido como rivales en los Valencia-Villarreal y también en los Real Madrid-Atlético de Madrid . Se conocen a la perfección. Son colegas con muchas horas de vuelo en los banquillos. Como técnico del Valencia, por ejemplo, Quique vivió siete duelos entre Liga y Copa contra el Villarreal. Todos ellos, con el Ingeniero en el banquillo groguet. El bagaje no puede ser más equilibrado: tres victorias para cada equipo y un empate, con siete goles anotados por el Valencia y ocho por el Villarreal. De las tres victorias valencianistas, dos se produjeron en la ida y la vuelta de los octavos de final de la Copa del Rey 2005-2006, que sacó adelante el conjunto de Quique. En LaLiga, el Valencia sólo le ganó una vez al Villarreal de Pellegrini , que se impuso en tres duelos (dos de ellos en La Cerámica y uno en Mestalla), además de lograr un empate jugando como local. El otro derbi que ambos entrenadores han vivido como adversarios ha sido el madrileño. Dos episodios ligueros correspondientes a la temporada 2009-2010 con tres elementos comunes: hubo muchos goles (cinco en cada partido), se registró el mismo marcador (3-2) y la victoria se la llevó en las dos ocasiones Pellegrini , al cargo del banquillo blanco. En la primera vuelta, el Real Madrid se colocó 0-3, aunque en la segunda parte ajustó el marcador el cuadro colchonero con tantos de Forlán y Agüero; y en el duelo de la segunda vuelta, Reyes adelantó al Atlético en el Bernabéu (0-1), pero el Real se rebeló hasta colocar el 3-1 antes de que Forlán recortase la diferencia sin impedir que los tres puntos se quedasen en el coliseo de Chamartín. El balance del Ingeniero Pellegrini entrenó a cuatro equipos en Chile y uno en Ecuador antes de dar el salto a Argentina, donde ya vivió clásicos en sus etapas como técnico del San Lorenzo y el River Plate . Con el primero no pudo ganar al Huracán (dos empates y una derrota en tres partidos) y con el conjunto millonario contabilizó un triunfo, un empate y dos derrotas en cuatro enfrentamientos con Boca Juniors . Su aventura en España arrancó en Villarreal, al que dirigió cinco temporadas. Un lustro en el que se midió en una docena de ocasiones al Valencia con un balance favorable: seis victorias, dos empates, cuatro reveses, 21 goles a favor y 14 en contra. Luego fue al Real Madrid una campaña , con los resultados ya comentados ante el Atlético y dos clásicos con el Barcelona que perdió: 1-0 y 0-2. De la capital de España se mudó a la Costa del Sol para dirigir al Málaga, con el que vivió enfrentamientos con tres equipos andaluces. Siete veces se enfrentó al Sevilla (dos victorias, dos empates y tres derrotas); cuatro al Betis (un triunfo, un empate y dos derrotas); cuatro al Granada (dos victorias y dos derrotas) y una (victoria) al Almería. Acabada su fructífera etapa en el Málaga, Pellegrini fue el elegido para el banquillo del pujante Manchester City . Y el Ingeniero salió bien parado de sus duelos con el United, logrando tres victorias, un empate y dos derrotas, con diez goles a favor y seis en contra. Tras un trienio en China, volvió a Inglaterra. Esta vez a Londres, al West Ham , con el que se enfrentó tres veces al Arsenal (un triunfo y dos derrotas); otras tres al Chelsea (victoria, empate, derrota); y otras tres al Tottenham (una victoria y dos derrotas). El bagaje de Quique Como entrenador, Quique ha estado en tres etapas en el Getafe , con el que acumula 119 partidos. Siendo preparador azulón se midió hasta en catorce ocasiones con el Real Madrid, el Atlético de Madrid y el Rayo Vallecano. Sus duelos contra el equipo blanco registraron un balance de dos victorias y cuatro derrotas; a los colchoneros nunca les ganó: tres empates y dos derrotas en cinco encuentros; y con los rayistas, siempre acabó en tablas en tres partidos. Del Getafe fue al Valencia, el club en el que desarrolló gran parte de su carrera como jugador . Y en Mestalla vivió los ya citados siete partidos con el Villarreal de Pellegrini, así como dos encuentros, saldados con una victoria y una derrota, contra el otro equipo de la ciudad del Turia, el Levante. Su bienio en Valencia dio paso a una temporada en Portugal, en el Benfica , cuya máxima rivalidad la dirime en el país vecino frente al otro conjunto de la capital lisboeta, el Sporting de Portugal. Con un triunfo y una derrota se saldaron los dos duelos de este calibre que vivió Quique en el banquillo benfiquista. Con el Oporto igualó los dos partidos. El peor derbi que se le ha dado al madrileño en su trayectoria ha sido el Atlético de Madrid-Real Madrid. Dirigió al equipo rojiblanco en 102 partidos y durante dos temporadas en las que ganó la UEFA Europa League , pero ante el coloso de Chamartín siempre se le negó el triunfo e incluso el empate: pleno de derrotas en seis enfrentamientos, con seis goles a favor y catorce en contra. Al Barcelona sí le ganó en una ocasión como entrenador del Espanyol. Fue en la ida de los cuartos de la Copa del Rey, en la temporada 2017-18, con tanto de Melendo (1-0) cuando el partido ya expiraba. Un empate y cuatro derrotas (tres goles a favor y quince en contra) conforman el balance de Quique como preparador blanquiazul ante el Barça de Messi . Este domingo, en el Benito Villamarín, añadirá un nuevo derbi a su importante currículum. Posiblemente el más visceral de todos. El que no admite la comparación con ninguno y del que debe haberse empapado esta semana con un cursillo acelerado. En esto último, Pellegrini parte con ventaja.